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«Siempre he querido publicar pocos discos, pero los adecuados; y tener los medios para cuidar cada detalle, empezando por el artwork y los aspectos visuales».

Para PHILIPPE COHEN SOLAL, de GOTAN PROJECT, se trata de calidad, no de cantidad: «Siempre he querido sacar pocos discos, pero los justos; y tener los medios para cuidar cada detalle, empezando por el artwork y los aspectos visuales». Esto también forma parte del toque ¡YA BASTA! Cada portada, folleto y vídeo evade el cliché con una firma específica basada en el ojo elegantemente oblicuo de la artista visual Prisca Lobjoy.

Este eclecticismo ha situado a la banda por encima del resto y ha asegurado su dominio de las listas de éxitos europeas. Entre sus contemporáneos figuran Kruder & Dorfmeister, UFO, Patrick Forge, Thievery Corporation, Gilles Peterson… «Siempre nos hemos sentido más en línea con Londres que con París». De hecho, la etiqueta atrajo inicialmente apoyo en el Reino Unido, que suele ser más abierto a géneros que no se clasifican tan fácilmente. «Siempre quise incluir música de todo el mundo, pero nunca intenté hacer fusiones como ‘world music'». Las influencias musicales de cada disco se miden con cautela para crear una mezcla sin precedentes -parafraseando el nombre de su editorial- de ciencia y melodía.
«En ¡YA BASTA! nos dedicamos a componer, no sólo a reciclar. Queríamos crear nuestro propio universo. Gotan no podía consistir sólo en cubiertas. Sólo hicimos unos pocos, y cada vez eran hitos vagos», como Chunga’s Revenge de Frank Zappa en el primer álbum de Gotan Project. Solal también toca con versiones en su álbum en solitario The Moonshine Sessions.

En cuanto al futuro: «En lugar de intentar crecer en tamaño, preferiría aislar el sello… al menos de los demás. Me gustaría que fuera mi laboratorio de ideas, sin quebraderos de cabeza. Esto no significa que esté en contra de las colaboraciones, al contrario». ¡YA BASTA! es definitivamente coherente con sus raíces en la noción de la teoría del crecimiento negativo del movimiento zapatista.
«No hay ningún esquema ni, sobre todo, ninguna estrategia de marketing. Soy lo bastante ingenuo para creer que si un disco es bueno, se correrá la voz. Cuento con la curiosidad de todos». Y así surgió ¡YA BASTA! a mediados de los 90, «en referencia al subcomandante Marcos, por supuesto, pero también para decir ¡basta ya! a la escena techno-house, que se estaba volviendo repetitiva, copiándose a sí misma», así explica PHILLIPE COHEN SOLAL, fundador del sello, un artista y melómano cuya frustración se convirtió en curiosidad, que se convirtió en anhelo, que finalmente llegó a manifestarse en ¡YA BASTA! Registros.

PHILIPPE COHEN SOLAL empezó como DJ en emisoras de radio independientes, antes de convertirse en director de A n R en Polydor durante tres años. Destacó en la primera oleada de música electrónica francesa a principios de los 90 en la recopilación «Paris Union Recording», antes de producir un álbum de techno-house titulado «Bass Academy», que nunca llegó a publicarse.
Después se unió a Virgin Sound «para saldar algunas deudas», convirtiéndose en uno de los supervisores musicales más importantes de su generación :»… Me convertí en productor y editor por casualidad. He visto a demasiados grandes sellos discográficos arruinar las carreras de los artistas. Si hubiera conocido a la persona adecuada, no habría estado ahí. Montar un sello lleva tiempo». El tiempo es muy importante en ¡YA BASTA!un sello con estilo propio, gracias al gusto ecléctico de Solal, que incluye productores de Chicago y Detroit a los Sound Factory Essentials, el corta y pega de la escena acid house británica a Kip Hanrahan, acogiendo por el camino electrónica minimalista con voces extravagantes.

Tiene «los medios para hacer producciones sin presiones ni compromisos», aunque eso signifique trabajar en universos paralelos o periféricos: del largometraje al documental, de la publicidad a la moda, mientras desarrolla sus propios ritmos más bien down-tempo y obsesionados con lo latino. Exactamente lo que hace todo el mundo hoy en día, se podría pensar, pero como explica Solal: «en 1995, sólo unos pocos lo hacían. Pero la moda no tardó en ponerse al día».
El alter ego de Solal en la mayoría de los proyectos, Christoph H Müeller, es un músico procedente de la escena electrónica suiza, donde ya había tenido un éxito underground en 1987 bajo el nombre de «Touch El Arab». En palabras de Solal: «Un músico fino, con verdadero gusto, sensibilidad con el sonido y conocimiento de las máquinas. La fría moderación de Christoph armoniza mi lado hiperactivo…».
Comparten el deseo de crear música cinematográfica que haga querer bailar y pensar. Juntos crearon la campaña ¡Ya Basta! Crew, una personalidad múltiple que contiene a Boyz From Brazil, Stereo Action Unlimited, Fruit Of The Loop… cuyo sonido se reúne en el primer recopilatorio del sello «Rue Martel», que obtuvo un éxito más que notable con su «Hi-Fi Trumpet», un clásico instantáneo.

Tras un puñado de remezclas y temas en vinilo, lanzaron el siguiente capítulo de sus aventuras bajo el alias «The Boyz From Brazil»… antes de arremangarse una vez más y crear Gotan Project con el guitarrista Eduardo Makaroff, un argentino afincado en París.
Ayudados por la maestría de la bandoneonista Nini Flores, el pianista y arreglista Gustavo Beytelmann y la violinista Line Kruse, el equipo se rindió al lado más melancólico del tango argentino y evocó a Astor Piazzolla y Carlos Gardel en su tango inspirado. «Pero también indagamos en repertorios paralelos como milongas, valses, y sobre todo trabajamos ritmos más rurales como la chacarera…». Unos cuantos singles de 10″ de edición limitada aseguraron el improbable éxito de este nuevo tango en las pistas de baile de todo el mundo, a pesar de las dudas iniciales de algunos sectores.
Desde entonces, más lanzamientos han situado a ¡YA BASTA! en la vanguardia de su género.

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